Decenas de vecinos de la zona, así como miembros de la Fundación, acompañados de familiares y amigos, participaron activamente en la repoblación de la antigua escombrera, hoy convertida en mirador y espacio de ocio.
El Mirador de la Subita de Liédena sigue tomando forma como nuevo atractivo turístico y de ocio para la zona. El pasado mes de abril, decenas de vecinos de la localidad y de otras colindantes, así como miembros, familiares y amigos de Fundación Geoalcali, se sumaron a la iniciativa del ayuntamiento para repoblar con árboles el Mirador de la Subita. Allí, pala en mano, todos participaron en la plantación de una docena de retoños de quejigos, arces y tamarices.
Según contaba Jasone Ruiz de Cortázar, miembro de la Fundación, “representantes y familiares de la Fundación participamos en el acto «adoptando» un árbol que fue plantado por los niños. En este acto no sólo se trataba de plantar el árbol sino que todos adoptásemos el compromiso de mantenerlo y «hacerlo nuestro»”.
Lo que hace algo más de un año era una escombrera, hoy se ha convertido en una zona de ocio, situado a poco más de un kilómetro de Liédena, que ofrece unas espectaculares vistas desde las que se divisan la Sierra de Santa Cruz, el Camino de Aspra, el pueblo de Liédena y la Sierra de Leyre.
Para nosotros – según señaló el alcalde de la localidad Ricardo Murillo – es una alegría promover este tipo de actividades, sobre todo después de ver cómo los árboles que plantamos el año pasado se mantienen fuertes, como los niños de Liédena. La idea es cubrir de árboles todo el tramo que va desde el mismo mirador hasta la entrada del camino.
Si se cumplen las previsiones, dentro de tres años los más de cincuenta metros que hay de distancia entre ambos puntos se cubrirán de árboles, confundiéndose con los pinos y la retama que los rodea y dando cobijo y sombra a una zona antes degradada y olvidada.
Para Jasone Ruiz de Cortázar, actividades de este tipo así encajan a la perfección con el cometido de la Fundación:
Con iniciativas como esta no sólo ayudamos a disponer en la localidad de una zona de ocio más y para el disfrute de todos sino que, además, llevamos a la práctica uno de nuestros compromisos y un pilar fundamental de la fundación como es el cuidado del medio ambiente.
Con su apoyo, Fundación Geoalcali ha hecho posible las actuaciones llevadas a cabo en esta superficie de más de 16.000 m2, convirtiendo el espacio arbolado en un nuevo atractivo turístico para la zona.
Representantes y familiares de la Fundación participamos en el acto «adoptando» un árbol. No sólo se trataba de plantar el árbol sino que todos adoptásemos el compromiso de mantenerlo y «hacerlo nuestro» Jasone Ruiz de Cortázar, Fundación Geoalcali